Recientemente, parece ser que el género metroidvania está viviendo una segunda juventud dada la ingente cantidad de propuestas que se están lanzando recientemente. Por otro lado, si vemos que cada vez se lanzan más “souls-like” (juegos basados en una gran dificultad, entre otros detalles), es normal que tarde o temprano llegarán propuestas que intentaran aunar ambos géneros. Y esto es lo que ocurre con The Last Faith, un título que aúna el metroidvania son el souls-like y que, si me acompañáis en este análisis, os contaré que me ha parecido
Una historia oscura
Como ya se puede ver por el tono de las imágenes que acompañan este análisis, la historia que viviremos no será nada alegre y nos pondrá en el papel de Eric. Como suele ser habitual, despertaremos sin recordar nada y muy poco a poco se irá desgranando la historia en la que sabremos que tenemos una maldición y como nuestro protagonista se quiere curar.
El ritmo de la historia y lo que se nos va contando es algo lento y que se nos cuenta en pequeñas porciones, sin tener un gran “plot twist” ni una cinemática en la que dejes el mando y durante dos minutos te cuenten algo diferente.
Será labor tuya ir descubriendo la historia como si el juego te fuera dejando migajas de pan y tuvieras que ir encontrándolas todas para entender la globalidad de la historia.
Una jugabilidad Metroidvania…
Como decía, el juego une perfectamente los rasgos más característicos de ambos géneros. Por un lado, tendrás las clásicas mecánicas metroidvania donde deberás regresar a puntos por los que has pasado ya pero no podías acceder. Además, el juego no lo oculta y ya desde el principio lo deja claro al ver detalles en los escenarios que nos hacen pensar que hay sitios en los que, por ahora, no podemos acceder.
Al iniciar partida, deberemos escoger entre una de las cuatro clases de personaje que tenemos (guerrero, rebelde, contemplaestrellas y especialista en tiro). Cada uno de ellos tendrá diferentes estadísticas en aspectos como la vitalidad, la fuerza, la destreza, la mente o el instinto.
Una vez iniciada nuestra aventura, tendremos el clásico desarrollo metroidvania en el que deberemos explorar el escenario, aventurándonos muchas veces en lo desconocido y explorando todos los rincones del extenso mapeado. No faltará el viaje rápido, en los mismos altares en los que grabamos la partida (y que respawnearán a los enemigos) ni las pociones para curarnos en combate.
En cuanto a este, el combate es, como suele ser en un souls-like, muy desafiante, especialmente en los bosses. Respecto a los enemigos normales, tampoco te podrás despistar mucho ya que también son peligrosos. Además, creo que hay una buena variedad de ellos y cada uno de los enemigos tendrá su tipo de ataque diferente. Además de hacernos daño, nos podrán provocar estados como “sangrando” o “electrocutado” en el que durante unos segundos sufriremos las consecuencias lógicas de dicho estado.
…con dificultad Souls-Like
En relación a los bosses, como decía, son desafiantes y cada uno de ellos tendrá sus rutinas de ataque, que deberás conocer y estudiar a fondo para poder salir victorioso. Además muchos de ellos tendrán más de una “fase” y deberás guardar esas valiosas pociones para la parte final del duelo
El combate requerirá cierto timing ya que las acciones de nuestro personaje no son inmediatas y, por ejemplo, tomarse una poción requerirá de una pequeña animación en la que estarás expuesto a los enemigos, por lo que deberás alejarte un poco para poder tomártela.
Tendremos también hechizos/magias pero, en mi opinión, no serán tan útiles como nuestras armas de mano o de fuego, aunque ciertos bosses requerirán el uso de algunas de esta magias.
En definitiva, la intensa jugabilidad que nos propone The Last Faith aunada a su exploración hacen del juego una obra muy digna que, sin llegar a la excelencia que proponen juegos como los dos Blasphemous, agradará a todos aquellos que disfruten con unos combates difíciles per reconfortantes y una exploración metroidvania con recompensas si te adentras en ella.
Un bello lienzo Gótico
Como decía al inicio del análisis, el tono del juego se centra en un estilo gótico muy marcado con estética pixel-art de gran factura. Aprovechando que anteriormente he mencionado a Blasphemous, su estética te recordará muy mucho al juego español, pero si que he de decir que Blasphemous hace un esfuerzo per tener personalidad propia al basarse todo su lore y paisajes, enemigos etc en el catolicismo. En cambio, The Last Faith, carece de esa identidad propia y recurre demasiado a esa estética Castlevania ya vista en muchas ocasiones. No sin desmerecer el gran estilo artístico, sí que se echa de menos alguna seña identitaria con la que poder destacar del juego al que si o sí compararás.
El juego viene con textos en castellano y en cuanto al rendimiento no hemos observado ningún fallo. Si que he de decir que el juego no tiene quick-resume y, aunque no es nada grave, es una característica a la que ya nos hemos acostumbrado tanto en Xbox Series que cuando un título no la incorpora, la echamos mucho de menos.
En definitiva, The Last Faith…
A lo largo de las 15 horas que te puede durar The Last Faith (dependiendo de tu habilidad en este tipo de juegos y cuanto quieras explorar el mapa), tenemos una agradable mezcla de metroidvania con souls-like que exigirá tus mejores reflejos y perseverancia para liquidar sus difíciles bosses. Aún faltándole algo de identidad propia, entretendrá a todos aquellos que disfruten con los juegos de estos géneros
Si queréis leer más análisis de este tipo de juegos y de muchos otros, no dudéis en pasaros por aquí para poder leerlos todos.
The Last Faith
Pro.
- Buen equilibrio en su dificultad
- El estilo artístico es cautivador
Contra.
- Peca de falta de originalidad
- Donde trata ser diferencial, flaquea
